Together
Como niños, niñas y jóvenes tenemos derecho a compartir nuestras opiniones sobre las cosas que nos importan. Cuando los gobiernos toman decisiones que nos involucran y nos impactan, deberían escuchar lo que tenemos que decir. No importa la edad que tengamos ni de dónde venimos: todos los niños, niñas y jóvenes tienen este derecho.
Estas podrían ser decisiones sobre cómo se administran nuestras escuelas, cómo detener el acoso escolar o garantizar que los niños, niñas y jóvenes tengan la ayuda adecuada para sentirse bien. Incluso en emergencias, como la pandemia de Covid-19 o la crisis climática, los/as adultos/as todavía necesitan conocer nuestras opiniones y considerarlas al tomar decisiones que nos afectan.
Aunque es nuestro derecho, muchas veces no se nos da la oportunidad de compartir nuestras opiniones y muchos niños, niñas y jóvenes se sienten excluidos de las decisiones que los/as adultos/as toman en nuestras vidas.
A los niños, niñas y jóvenes se les deben brindar oportunidades para participar y hacer que se escuchen nuestras voces, y queremos que los gobiernos hagan que esto suceda.
Estas podrían ser decisiones sobre cómo se administran nuestras escuelas, cómo detener el acoso escolar o garantizar que los niños, niñas y jóvenes tengan la ayuda adecuada para sentirse bien. Incluso en emergencias, como la pandemia de Covid-19 o la crisis climática, los/as adultos/as todavía necesitan conocer nuestras opiniones y considerarlas al tomar decisiones que nos afectan.
Aunque es nuestro derecho, muchas veces no se nos da la oportunidad de compartir nuestras opiniones y muchos niños, niñas y jóvenes se sienten excluidos de las decisiones que los/as adultos/as toman en nuestras vidas.
A los niños, niñas y jóvenes se les deben brindar oportunidades para participar y hacer que se escuchen nuestras voces, y queremos que los gobiernos hagan que esto suceda.